Ayer para la zona euro fue un día positivo en cuanto a datos económicos se refiere. En el último trimestre de 2020 el PIB cayó menos de lo estimado inicialmente y el empleo aumentó respecto a los tres meses anteriores, a pesar de los confinamientos por la pandemia de COVID-19.
Eurostat dijo que el PIB de los 19 países que comparten el euro se contrajo un 0,6% intertrimestral, con una caída interanual del 5,0%. Anteriormente había estimado que la contracción era del 0,7% en el trimestre y del 5,1% en tasa interanual. En relación al empleo, creció un 0,3% intertrimestral después de un aumento trimestral del 1,0% en los tres meses anteriores. Por otro lado, la confianza de los inversores en Alemania subió en febrero superando las previsiones más optimistas, ante la expectativa de que el consumo resurja con fuerza en los próximos meses, según informó el instituto ZEW, lo que ha impulsado las perspectivas de la mayor economía europea.
Mientras tanto, los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años continúan aumentado y superaban ayer el 1,26% por primera vez desde el pasado marzo. El presidente de la Fed de St.Louis, declaraba ayer en una entrevista que la tasa de inflación en EE.UU. "está en buena forma" por ahora y es posible que se acelere durante este año. También destacó la reciente volatilidad de los mercados financieros pero dijo que no existe una burbuja. "Uno ve frenesí especulativo por un tiempo en los mercados y eso es parte del proceso", declaró.