Tal y como se esperaba, la Fed subió ayer el tipo de interés de referencia a un rango del 1,50%-1,75% y pronosticó al menos otros dos aumentos más en 2018, una señal de una mayor confianza en que los recortes de impuestos y el aumento del gasto público impulsarán la economía, la inflación y llevarán a un endurecimiento monetario más agresivo en el futuro. En la primera reunión de política monetaria bajo la dirección de Powell, la Fed ha señalado que la inflación debería moverse finalmente al alza tras años de estar por debajo de su objetivo del 2%, y añadió que la economía ganó impulso. También aumentó algo el tipo de interés neutral a largo plazo -el nivel en el que la política monetaria no impulsa ni desacelera la economía- una señal de que el actual ciclo gradual de alzas del tipo podría continuar más tiempo de lo que se pensaba. En la conferencia de prensa posterior a la reunión, el presidente de la Fed señaló que el organismo se mantiene en una senda gradual de incrementos de tipos, pero que necesita estar alerta sobre la inflación. “Estamos tratando de tomar una posición intermedia", apuntó Powell, agregando que no hay señales de que la economía se encuentre en una senda de aceleración de la inflación. Los miembros del comité estuvieron divididos sobre si se necesitarían dos o tres alzas adicionales de tipos este año y estiman que los tipos aumentarían tres veces el próximo año y dos en 2020.