Pese a la situación en Cataluña, la CNMV considera que “el indicador de estrés continúa en un nivel bajo”. Es la principal conclusión de su informe trimestral sobre estabilidad financiera en España. A principios de octubre el indicador de estrés, que analiza la evolución de los distintos riesgos financieros e identifica las principales fuentes de los mismos, se situaba en 0,15 puntos frente a 0,19 a finales del trimestre anterior. No obstante, cuando habla de la situación en Cataluña reconoce que "a medio plazo, la prolongación de esta crisis puede tener consecuencias notables sobre los mercados y la actividad económica". En concreto, señala que se puede producir un encarecimiento en las condiciones de financiación que dé lugar a descensos en las cotizaciones y rebrotes puntuales de la volatilidad. En cuanto al impacto sobre la actividad económica, apunta que es “difícil de cuantificar", pero señala que existen algunos indicadores "que muestran ya revisiones a la baja en los beneficios esperados por acción de varias sociedades cotizadas durante los próximos doce meses". Mientras tanto, los tres principales índices de Wall Street volvían ayer a abrir en niveles récord, siguiendo el Nikkei que ayer anotó su decimoquinto día consecutivo de ganancias y alcanzó un máximo en 21 años. Los inversores celebraban la continuación de las medidas de estímulo en Japón tras la victoria del partido gobernante en los comicios del fin de semana.