Ayer el BCE, tal y como se esperaba, dejó sin cambios los tipos de interés de referencia en el 0%. La decisión fue tomada por unanimidad, al igual que la de no cambiar la orientación para la política monetaria y la de no establecer una fecha para discutir modificaciones en el programa de estímulo. El Presidente del BCE tras insinuar la posibilidad de un ajuste de la política el mes pasado, indicó que cualquier cambio solo sería gradual y precisó que estas discusiones deberían de tener lugar en otoño. En el comunicado el BCE señala que espera mantener los tipos de interés actuales “durante un periodo largo de tiempo” y recuerda que está dispuesto a ampliar la cantidad y la duración del programa de compra de activos si las condiciones financieras lo exigieran y que actualmente suponen compras mensuales por importe de 60.000 millones mensuales. El BCE ha asegurado que continuará con la compra de activos hasta 2017, o más adelante si fuese necesario hasta que se “observe un ajuste sostenido de la senda de inflación que sea compatible con su objetivo”. El comunicado prácticamente no introdujo cambios con respecto al anterior. En la rueda de prensa el presidente ha destacado la indiscutible mejora de los datos económicos de la eurozona en los últimos meses. Sin embargo “la inflación aún no está donde queremos que esté, donde debe estar” y por eso el presidente dijo que el BCE debe ser “paciente” para lograr el objetivo de inflación por debajo pero cerca del 2%.
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