Tras una problemática cumbre del G-7 el pasado fin de semana, el temor de los inversores a una ruptura de la zona euro se disipaba después de que el nuevo ministro italiano de Economía prometiera mantener al país en el euro y recortar los niveles de deuda. Su promesa impulsaba los títulos del sector bancario en la zona euro, sobre todo en Italia, donde el índice que recoge los títulos bancarios se anotaba ayer una subida del 5,85%. La “conmoción” de la cumbre del G7 está teniendo distintas reacciones a ambos lados del Atlántico. Ayer, el ministro de Economía alemán declaraba que los acontecimientos de la cumbre han unido a la Unión Europea. “Es importante que demostremos unidad a todos los niveles”.
Mientras tanto, el presidente estadounidense, después de haber abandonado la cumbre antes de tiempo y anunciar que se retiraba del comunicado conjunto, ayer echaba un poco más de leña al fuego con una serie de tuits donde, en un arrebato, se expresaba contra sus aliados en la OTAN, la Unión Europea y el primer ministro canadiense. “El comercio justo ahora se llamará comercio tonto si no es recíproco”, dijo Trump. “Perdón, no podemos dejar que nuestros amigos, o enemigos, se aprovechen de nosotros en el comercio, ¡Debemos poner primero al trabajador estadounidense!”, agregó. Unos comentarios que parecen destinados a tocar la fibra sensible de los votantes que apoyan su “Primero Estados Unidos”.