A diferencia de otros bancos centrales, como la Fed y el BCE, el Banco de Japón está aún muy lejos de reducir el programa de estímulos iniciado en 2013. Ayer, como era previsible, en su reunión de política monetaria mantuvo su programa, al tiempo que recortaba sus pronósticos de inflación y advertía sobre los crecientes riesgos para la economía por la fragilidad de la demanda global. El banco central mantuvo su opinión de que la economía de Japón, la tercera más grande del mundo, continuará expandiéndose a un ritmo moderado. Sin embargo, la creciente presión sobre el crecimiento mundial por la guerra comercial entre Estados Unidos y China, los socios comerciales más grandes de Japón, genera desconfianza sobre el panorama que dibuja el BoJ y apunta a la dificultad de que alcance su objetivo de inflación del 2%. Aquí, en Europa, el asunto central continúa siendo el Brexit. La fecha oficial prevista para que el Reino Unido abandone la UE está fijada a las 23:00 horas GMT del 29 de marzo, pero sigue sin saberse cómo se llevará a cabo el divorcio. Ayer, un portavoz de la UE dijo que el bloque europeo haría todo lo que esté en su mano para evitar controles fronterizos entre Irlanda, estado miembro de la UE, y el territorio británico de Irlanda del Norte, independientemente de cómo se produzca el Brexit. Mientras, en EE. UU. el cierre parcial del gobierno llega al día número 33 sin avances a la vista.