La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha mejorado levemente las previsiones de crecimiento a nivel mundial pese a que continúa a la guerra de Ucrania y la fuerte inflación derivada de la misma.
Las últimas Perspectivas Económicas de la OCDE proyectan una desaceleración del crecimiento global, pero lo fija en el +3,1% este año y en el +2,2% en 2023, por lo que no son demasiado pesimistas, ya que en el anterior informe se hablaba de +3,0% para 2022 y también del +2,2% para el siguiente año.
Además, recuerda que la alta inflación está erosionando los ingresos y los gastos de los hogares, lo que afecta especialmente a los más vulnerables.
Detalles del crecimiento aminorado
En el caso de España, la previsión de crecimiento de la OCDE sube del 4,4% al 4,7% para este 2022, pero espera para 2023 un alza de sólo el 1,3%, (hace 3 meses prevía un +1,5%). Por último, prevé que en 2024 creceremos un 1,7%.
Francia sólo crecerá un 2,6% en 2022 y un 0,6% en 2023 (mantiene cifras respecto al anterior informe), Alemania un 1,8% y tendrá recesión del 0,3% en 2023 (mejora respecto a las anteriores previsiones); Reino Unido crecerá un 4,4% este año, más de lo esperado. En 2023, eso sí, sufrirá una recesión del -0,4% del PIB.
En cuanto a Estados Unidos, espera que este año crezca algo más su economía, un 1,8%. En 2023 sólo crecerá un 0,5%, lo mismo que lo proyectado en el anterior informe.
La rusa será, de entre las grandes economías mundiales, la que más pague esta crisis provocada por la guerra que ella misma ha iniciado: se espera que su PIB caiga un -3,9% este año y un -5,6% en 2023.
Las razones fundamentales son la incertidumbre internacional debido a la guerra de Ucrania, la elevada inflación generada y la desaceleración de la demanda externa.
Fuerte inflación
Para España se espera una fuerte inflación del 8,6% como cierre de este 2022, pero antes se prevía del 9,1%.
En 2023 se proyecta un alza del IPC del 4,78%, algo inferior a lo esperado hace unos meses: 5,0%.
La inflación media para los países de la OCDE será del 9,4% y del 6,57% en 2023, por encimas de las anteriores previsiones.
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