El dato preliminar de crecimiento del PIB de EE.UU. en el primer trimestre muestra que, en términos anualizados, registró un crecimiento del 1,6%, frente al 3,4% del cuarto trimestre de 2023. El descenso se debe en parte a una caída de los inventarios y una significativa reducción en el crecimiento del gasto público que no son determinantes para un crecimiento sostenido. El crecimiento está repuntando en sectores que reflejan una mayor confianza en la economía en el futuro con subidas tanto en inversión residencial, como en no residencial y equipamiento industrial, y este gasto al alza de capital es lo que impulsará el crecimiento en los próximos trimestres. El gasto discrecional de los consumidores, aunque se moderó ligeramente, siguió creciendo a buen ritmo, incluso con una caída en las compras de automóviles.
La semana pasada, el Fondo Monetario Internacional mejoró su pronóstico para el crecimiento de Estados Unidos en 2024 al 2,7% desde el 2,1% proyectado en enero, citando un empleo y un gasto de los consumidores más fuertes de lo esperado. En cuanto a los precios, se publicó el índice PCE trimestral de precios de los gastos de consumo personal, que aumentó en el primer trimestre a un ritmo anual del 3,4% frente al 2,1% del trimestre anterior. El PCE subyacente, en el que se excluyen alimentos y energía se situó en el 3,7% desde el 2,0% del trimestre anterior, y esta subida refleja la en gran parte la subida mensual del mes de enero. La inflación mensual PCE correspondiente a marzo se publica hoy, con una previsión de un 0,2 % mensual. En términos interanuales las previsiones son de un 2,6% para el índice general y un 2,7% para el PCE subyacente.