Hoy, el BCE celebra su segunda reunión del año, en la que se espera un recorte de tipos de interés de 25 pb, hasta el 2,50%. La decisión llega en un contexto marcado por la imposición de aranceles por parte de EE.UU. y el estancamiento de la economía europea en febrero. El sector servicios de la eurozona mostró un crecimiento marginal, insuficiente para compensar la debilidad del sector manufacturero. El PMI compuesto se situó en 50,2 puntos, apenas por encima del umbral que separa la contracción del crecimiento.
La desaceleración de la demanda y las presiones inflacionarias siguen siendo factores clave para el BCE. En el sector servicios, la inflación alcanzó su nivel más alto en diez meses, con el índice subiendo de 53,9 a 54,7. A nivel general, la inflación en Europa se redujo al 2,4% en febrero, acercándose al objetivo del 2%. Sin embargo, el crecimiento económico sigue siendo débil: el PIB europeo aumentó apenas un 0,1% en el último trimestre de 2024. En diciembre, el BCE proyectó un crecimiento del 1,1% para 2025, tras el 0,7% registrado el año pasado. Se espera que hoy actualice sus previsiones.
En Alemania, CDU/CSU y SPD, en negociaciones para formar una coalición de gobierno, acordaron crear un fondo de infraestructura de 500.000 millones de euros y revisar las reglas de endeudamiento para modernizar el ejército e incentivar el crecimiento en la mayor economía de Europa, con el objetivo de impulsar la inversión y fortalecer su competitividad.