La sala de lo penal del Tribunal Supremo confirma la absolución de Xabi Alonso y sus dos asesores por fraude fiscal. La Abogacía del Estado le pedía casi dos millones de euros que supuestamente había dejado de ingresar a las arcas públicas en los ejercicios fiscales de 2010, 2011 y 2012.
El campeón de Europa y del mundo con la selección española había firmado un contrato con la la sociedad Kardzali, con sede en la Isla de Madeira, en enero de 2009 a la que encargó la explotación de sus derechos de imagen. La sentencia diferencia el caso de Xabi Alonso del de otros futbolistas que han terminado pagando al fisco porque alcanzaron un acuerdo previo o porque han sido condenados.
Según la sala se dice que el recurso de casación impone unas reglas que impiden volver a juzgar el caso y que Xabi Alonso estaría absuelto por las sentencias de instancia, mientras que en el resto de casos había existido condena previa al jugador por fraude fiscal. Este es el primer argumento, pero el alto tribunal indica a otro. Reconocen los magistrados que llevar a fuera de España la empresa que explota tus derechos de imagen puede ser un "indicio" de fraude fiscal. Sin embargo, continúa diciendo que en este caso no hubo intención de defraudar ni tampoco Xabi Alonso desplegó una actuación clandestina y fraudulenta orientada a esconder sus ingresos.
Punto y final al caso
De este modo, Xabi Alonso termina y pone punto y final a su cruzada personal por demostrar que era inocente y que sus prácticas económicas siempre entraron dentro de la legalidad. Después de comenzar su carrera en la Real Sociedad y pasar por el Liverpool, recaló en el Real Madrid y fue residente fiscal en España entre 2009 y 2014, donde efectuó el pago del IRPF en los ejercicios 2010, 2011 y 2012, los años que han sido investigados.
Pero no declaró los rendimientos obtenidos por la explotación de sus derechos de imagen porque había cedido su explotación a una empresa radicada en Madeira (Portugal). Eso llevó a que fuera investigado y enjuiciado, pero en una primera instancia la Audiencia Provincial de Madrid le había absuelto. No obstante, el TSJ de Madrid mandó repetir el juicio, pero la Audiencia volvió a absolverlo de nuevo y, tras un nuevo recuros de la Fiscalía y la Abogacía del Estado, el Tribunal Superior ha ratificado esa absolución.