Una vez presentado Kylian Mbappé con el Real Madrid, 7 años después del primer intento, comienza una nueva era para el club y para el propio jugador, como es lógico.
Entre tanta pompa y celebración en el acto de presentación del delantero francés en el Santiago Bernabéu, hubo un detalle que llamó la atención sobre todos los demás en la rueda de prensa.
Y es que lejos de presentarse como una estrella arrogante que viene a cambiar el curso de las cosas, Mbappé optó por exponerse como una ayuda más al equipo, y no como su pieza principal.
Aseguró que llega al club blanco "con humildad y ambición" y que ahora su prioridad es "adaptarme al colectivo, porque juego en un equipazo".
Su humildad también la evidenció al hablar de su encaje en el equipo: "Es increíble el cariño de todo el madridismo. No soy nadie en el Madrid, no he jugado aún, y me dan un cariño increíble. Por eso tengo tantas ganas de jugar. Tengo que hacer las cosas bien dentro y fuera del campo para todo el madridismo, para mi familia también".
Jugará donde le digan
Lejos de afirmar donde quiere jugar, asumió que el técnico, Carlo Ancelotti, mandará dónde colocarlo en el campo y cuando sea, como un soldado más.
"Cuando hablo de adaptarme hablo de lo táctico, también de la personalidad de los jugadores. No quiero venir, meter mi gol y marcharme a casa", sentenció.
También descartó mandar él en lo que a su posible operación de nariz se refiere, poniéndose al servicio del Madrid: esperará a lo que le digan los médicos de la entidad y se someterá a su dictamen.
Tampoco se puso fecha para el debut: "Tengo ganas de jugar, pero es una pregunta para el 'míster'", admitiendo que su sueño es al menos poder jugar la Supercopa de Europa ante la Atalanta y así levantar su primer título europeo de clubes.
Nada de rivalidades con Vinicius
Mbappé también se encargó de desmentir los supuestos choques que habrá entre los 'gallos' de la plantilla, en especial en la delantera. Por ejemplo, reveló que tiene contacto habitual con Vinicius, que juega en su misma posición, y que tiene buena relación: "Los franceses siempre me dicen 'ven a Madrid', también Vini me mandaba mensajes, los otros jugadores cuando jugaba en contra. Gracias a ellos, es bueno saber que los jugadores del equipo me quieren y tengo muchas ganas de jugar con ellos".
Lo mismo ocurrió cuando fue preguntado sobre el dorsal 9, que era el único libre, pero no sus 2 preferidos: el 7 con el PSG y el 10 con Francia: "¿Quién dice que quería el 10? Tenemos un número 10 que es Luka Modric, para mí es un placer tenerle cerca. El dorsal no es importante para mí, no lo veo, la portería es lo que está delante".
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