En los últimos meses los datos económicos de China muestran una leve mejora en algunos de sus indicadores. Ayer se publicaron los de producción industrial y ventas minoristas del mes de agosto. El primero creció a su mayor ritmo interanual de los últimos cinco meses, un 6,3%, superando en una décima las previsiones y en tres décimas el dato de julio. La mejora se ha debido al fuerte crecimiento de mercado inmobiliario y al aumento del gasto en infraestructuras impulsado por el Gobierno. Esto ha generado un aumento en la demanda de productos que van desde el carbón así como de materiales de construcción y siderúrgicos como el acero, cuya producción ha aumentado en agosto un 3% interanual y acumula seis meses consecutivos de subida. Las ventas minoristas crecieron un 10,6% interanual desde el 10,2% de julio, mejorando también las expectativas. Además, la inversión en activos fijos aumento un 8,1% desde comienzos de año y la inversión extranjera directa aumentó un 5,7% en agosto frente al 4,5% que estimaba el mercado. La mejora en los datos, aunque modesta, apunta a que el crecimiento del PIB de China en el tercer trimestre podría mejorar el 6,7% interanual del segundo trimestre. Esto ayudaría a disipar las dudas que se generaron a principios de año en el que tanto el sector industrial como el de servicios registraron una fuerte desaceleración. Sin embargo otros indicadores como la inversión manufacturera o el gasto de las empresas privadas siguen mostrando riesgos en el modelo de crecimiento.
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