Roca, detenido en la primera fase de la citada Operación Malaya e ingresado actualmente en la prisión de Albolote (Granada) ha declarado ya anteriormente sobre los citados convenios afectados por la querella de Anticorrupción, que ha sido desglosada en un total de veintisiete diligencias y siempre ha mantenido una misma línea, la de afirmar que mientras Julián Muñoz fue alcalde accidental de Marbella, quien realmente mandaba era el fallecido Jesús Gil y Gil, como lo demuestra el hecho de que todos los documentos tenían que pasar por el denominado Club Financiero marbellí.
La querella de la Fiscalía Anticorrupción fue presentada por presuntos delitos contra la ordenación del territorio, prevaricación, fraude y malversación de caudales públicos, en los que implicaba al ex alcalde Julián Muñoz, a Juan Antonio Roca y al tasador José Mora, como cómplice de los dos primeros.
En sus declaraciones anteriores, además de intentar desviar la responsabilidad hacia Jesús Gil y Gil, Roca ha indicado que tras recibir el visto bueno de éste los convenios se enviaban al órgano competente para su aprobación y el pleno del Ayuntamiento marbellí lo remitía a su vez a la Junta de Andalucía para que emitiese un informe después de que los servicios técnicos estudiaran los mismos, por lo que según el ex asesor la Junta conocía todos los convenios de permuta y de aprovechamiento, que unas veces impugnó y otras no.