No todo es fiesta en el PSOE cuando piensan en el actual vicepresidente del Gobierno como futuro líder del partido. Sobre este tema aseguraba en su edición del domingo el diario '
El Mundo' que se ha abierto una fractura interna en Ferraz entre los que claman por la llegada de un
Rubalcaba salvador -las encuestas reflejan una segura derrota electoral frente al PP- y los que siguen gustando de las formas de la 'Nueva vía' que trajo
Zapatero. Dicho de otra manera: un choque entre los que están a favor de que vuelva la 'vieja guardia' que gobernó en los 80 y 90 y los que creen que Zapatero trajo un aire fresco al PSOE.
Este último sector exigirá un proceso limpio, ya que si gana Rubalcaba en su lucha por hacerse con el PSOE, debería hacerlo por primarias y no por una sucesión natural de líderes. No gusta, tampoco, que
José Blanco maquine en la sombra para esta sucesión 'tranquila' y sin demasiado ruido, apostando por el candidato natural, Rubalcaba. Cuenta '
La Razón' que si bien el actual pacto social para la reforma de las pensiones ha llevado ánimos a la gente de Ferraz, también existe un miedo a que todo lo tome Rubalcaba como algo propio.
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