Domingo por la noche. Ya se conocían los resultados de las elecciones a la alcaldía de Madrid. Miguel Sebastián, el gran derrotado, llama a Alberto Ruíz Gallardón, el gran vencedor, para felicitarle caballerosamente.
Pero Gallardón no olvida fácilmente: la tensa conversación duró apenas 40 segundos, el alcalde trató a su derrotado oponente de 'usted' y concluyó bruscamente diciéndole que "cuando yo vuelva a tomar posesión como alcalde, usted será tratado como un ciudadano madrileño mas". Y colgó.