Muchas interpretaciones y análisis se están produciendo en estas horas posteriores al anuncio de
Esperanza Aguirre de dejar la Presidencia de la Comunidad de Madrid y pasar a una segunda fila en la actividad politica. Desde luego, no se le podrá criticar su entrega a los intereses generales de los españoles, y especialmente de los madrileños, sino todo lo contrario.
A quienes nos dedicamos a la actividad económica, a procurar el desarrollo empresarial y a crear puestos de trabajo y progreso económico general, no nos compete entrar en debates políticos. A los efectos institucionales, los empresarios de Madrid nos debemos, como cualquier ciudadano que cree en las instituciones democráticas que nos hemos dado a través de la Constitución y nuestro Estatuto de Autonomía, a lo que digan las leyes sobre la solución politica que corresponda.
En definitiva, ése es un asunto que afecta al partido que gobierna en la Comunidad de Madrid y en la Nación.
Lo que sí quiero dejar bien claro como presidente de los Empresarios de Madrid es nuestro absoluto respeto a la decisión de Esperanza Aguirre, y remarcar que su dedicación a los intereses de los madrileños y de los españoles en general, ha sido siempre absoluta, admirable y leal.
Y, concretamente desde el punto de vista económico, todos los gobiernos que ha presidido han favorecido la actividad de las empresas (y las empresas la integran trabajadores y empresarios), han ido eliminando las trabas burocráticas que muy frecuentemente impiden la vida, e incluso el propio nacimiento, de las empresas, y han apostado claramente por defender la figura del empresario.
Conozco a Esperanza Aguirre desde hace muchos años. Sé de su determinación, de su sinceridad, de su claridad, de su defensa implacable de la libertad individual y colectiva, de su compromiso con España y sus instituciones, empezando por la Corona, y de su rotundo y profundo sentido de la amistad. Como presidente de los empresarios de Madrid y, si se me permite, también a titulo personal, quiero darle las gracias y manifestar de nuevo respeto por su decisión y hacia su persona.
Pocas personas conozco que lo merezcan tanto.
Arturo Fernández, presidente de los Empresarios de Madrid (CEIM-CEOE y Cámara de Comercio de Madrid) Lea también:
-
Aguirre anuncia por sorpresa su dimisión-
Hasta luego, lideresa, por Fernando Jáuregui-
¿A quién le tirarán ahora los tuppers?, por Pablo M. Beleña-
El adiós de Esperanza Aguirre, por Andrés Aberasturi