Amedo mete al Rey en la guerra sucia contra ETA: "Estaba al corriente del GAL"
Viernes 4 de octubre de 2013
El Rey Don Juan
Carlos estaba al corriente de todo lo que acontecía con los Grupos
Antiterroristas de Liberación (GAL), según el ex subcomisario de
Policía José Amedo en la presentación del que sin duda será un más que polémico
libro:"Cal viva. Un relato estremecedor: la verdad definitiva desde las
entrañas del GAL". Amedo ha apuntado hacia la cúpula del Estado como la que puso en marcha la guerra sucia policial contra ETA como única salida que le
habría quedado a Felipe González para frenar el golpismo de los militares. Al
mismo tiempo, ha metido a Fraga en el consentimiento de la puesta en marcha de
los GAL y ha arremetido contra el ex juez Baltasar Garzón, del que lo más
suave que ha dicho es que "era un torturador nato".
El ex subcomisario
José Amedo ha regresado a priemera plana con un libro, "Cal viva", y
unas declaraciones en su presentación en Madrid que avientan la polémica. La
guerra sucia policial contra ETA que el Gobierno socialista inició a finales de
1983 con la creación de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL)
"fue la única salida que le quedó a Felipe González y lo único que le
censuro fue su cobardía posterior de no querer asumirlo".
De esa forma,
Amedo, condenado junto al también ex policía Michel Domínguez por la creación
de los GAL, vuelve a despejar la "X" de quién los creó: según él, fue
la cúpula del Estado, con Felipe González a a cabeza y con el conocimiento,
apoyo o aquiescencia del Rey Don Juan Carlos y del entonces líder de la
oposición, Manuel Fraga Iribarne.
Fiel a la polémica,
el ex policía ha afirmado en un desayuno de presentación en Madrid junto al
periodista Antonio Rubio, autor del prólogo del libro, que "no me cabe la menor duda
de que el Rey estaba al corriente del GAL". De hecho, Amedo revela en su libro
una conversación que el Monarca mantuvo con su padre, José Ramón Amedo, en 1992
en Barcelona en la que, aunque no cita lo que le dijo sí deja adivinar que
Amedo habría sido una 'cabeza de turco' para tapar una 'razón de Estado'. Es decir, que el Rey habría
aumido el conocimiento desde la cúpula de la estrategia y creación de los GAL.
Pero también ha ido más lejos: ha metido al entonces presidente de Alianza Popular (actual PP) y
líder de la oposición, Manuel Fraga, en aquella 'guerra sucia' al señalar una
conversación que, según él, mantuvo Fraga con Felipe González en el Palacio de
la Moncloa en la que le habría dicho que la derecha española no iba a hacer
ninguna acción "contra lo que vosotros hagáis contra ETA". Por eso
sería tan inexplicable la posición de batalla que más tarde adoptó el PP
presidido entonces por José María Aznar, pero con Fraga como presidente de
honor del mismo.
"Garzón es un
torturador nato"
De a lengua de Amedo
no se ha salvado nadie en la presentación de u libro, publicado por la Esfera
de los Libros y que sin duda va a ser muy polémico. Un apartado muy especial lo
ha dedicado al ex juex condenado por prevaricación Baltasar Garzón, del que ha
dicho con énfasis que "torturaba a sus 'clientes': los machacaba,
literalmente. Garzón era un torturador nato que iba a obtener resultados por
encima de todo".
Del ex juez ya
escribió Amedo cosa muy abultadas en un libro anterior de memorias, un libro en
el que relataba las 'prevaricaciones' que, según él, cometió Garzón a lo largo
de la investigación de los GAL. Ahora, según Amedo, lo que hace en su libro es
desarrollar aún más esas acusaciones y dar detalles concretos: "Hubo un
momento en que Garzón nos dijo (a él y a Michel Domínguez) que o nos poníamos a
su lado o íbamos a la cárcel", porque lo único que le interesaría al ex
juez era coger en la trama a Felipe González, de quien quería vengarse, según
Amedo, por no haberle hecho ministro de Justicia e Interior.
"Nosotros dejaremos
de matarlos cuando ello dejen de matarnos a
nosotros"
Pero, efectivamente,
Felipe González sería la "X" de los GAL, según Amedo, que ha relatado
conversaciones de 'hemeroteca', como la que supuestamente habría tenido
González con el director de El Mundo, Pedro José Ramírez, en la que el antiguo
presidente del Gobierno habría dicho al periodista que "nosotros dejaremos
de matarlos (a los etarras, a través del GAL) cuando ello dejen de matarnos a
nosotros".
Una parte
especialmente dura es la que Amedo le ha dedicado las presiones llegadas desde la cúpula del
Gobierno de González a os abogados 'particulares' que el ex policía intentó
fichar para su defensa obviando los que le mandaban Moncloa:"El acuerdo
era estar dos años en prisión e indultarnos", dice Amedo, pero como Felipe
González incumplió el acuerdo, Amedo vio 'la jugada' que le estaban preparando y
dejó a os abogados que tenía:"Los abogados que enviaba el Gobierno cuando
yo estaba en la cárcel venían de parte de Felipe González", dice ahora el
ex policía.
En esa línea, revela
Amedo que un abogado contratado por él, Marcos García Montes, sólo le duro un
par de meses, porque entonces a García Montes le visitó una persona en su
despacho que le dijo"mira, esto es lo que hay sobre tí", y el abogado
decidió, según esta versión, dejar la defensa del ex policía.
Precisamente, sobre
estos aspectos jurídico-procesales Amedo ha sido muy explícito en la
presentación de su libro. Y mucho más explícitamente sobre la personalidad de
Garzón cuando José Bono y González le prometieron en 1993 que iba a ser
ministro: Garzón llegaría a decirle al abogado Jorque Manrique la siguiente
frase:"Decidle a Amedo que no hay que decir nada:voy a ser ministro del
Interior". Pero "yo ya sabía que Garzón iba a venir contra nosotros
(cuando Felipe González le despreciara), como así fue".
En fin, que en este
más que polémico libro, Amedo dice revelar unos cuantos secretos de los GAL, pero sin duda se reserva otros
tantos para ¿posteriores ocasiones? Uno de los secretos que guarda es quién era
el policía francés de sobrenombre Jean Louis que tantos y tantos buenos
servicios -muy bien pagados, naturalmente- brindó a la causa de los GAL. Amedo,
aún, guarda silencio, como de alguna manera le ha dicho el prologuista del
libro, el periodista de investigación de Antonio Rubio.
En este mismo acto
de presentacón, Rubio afirmó que "los GAL, treinta años después, continúan
vivos tanto política como judicialmente". Por ejempo, por lo asesinaos del
médico abertzales Santiago Brouard, en 1984, del que Amedo se ocupa ahora en su
libro "Cal Viva", o el último de los GAL, el de juan Carlos García
Goena, en 1987, del que algunos dicen que fue Amedo el autor o 'contratista' y
que él lo niega vivamente. Además, es un caso ya juzgado.
Rubio también
justificó este libro en el hecho de que el ex minitro José Barrionuevo ya contó
"su visión" de lo ocurrido, lo
cual "es lógico y necesario", pero igualmente se necesita que
"Amedo cuente también su verdad".