Se abre en el PSOE un
frente en Cataluña con el 'derecho a decidir'
Rubalcaba no se va: "Me siento unánimemente apoyado"
Griñán centra el debate:
todos tienen que hablar respecto al proceso autonómico o federal
lunes 29 de octubre de 2012, 17:30h
"Como secretario general
me he sentido unánimemente apoyado y también en la misión que tenemos como
dirección", y, por lo tanto, en la dirección del PSOE "nos hemos reafirmado en
nuestra voluntad de cumplir el mandato que nos dio el Congreso hace 9 meses". Ni relevo ni calendario de primarias: ése es el resumen que de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE ha
realizado Pérez Rubalcaba. Ni una voz discrepante, según él, aunque sí alguna
autocrítica que no desencadenará ningún proceso renovador. El único punto oscuro
es el 'derecho a decidir' que plantean los socialistas catalanes: se ha abierto
una fisura entre el PSOE y el PSC. Griñán ha pedido que 'todos' intervengan en ese debate.
Era la primera Comisión
Ejecutiva Federal del PSOE tras el desastre electoral en Galic ia y País Vasco
y había expectación por ver qué ocurría, pero ha sido más de lo mismo. Según
Pérez Rubalcaba, la dirección socialista le ha brindado su respaldo unánime, y
por lo tanto ni se va ni se abre un proceso de primarias para elegir al
candidato socialista para las próximas elecciones generales. Ya no es sólo
Rubalcaba y su equipo, sino que toda la dirección socialista se ha
'bunkerizado'.
De creer a Rubalcaba,
nadie en la Ejecutiva le ha planteado la necesidad de establecer plazos ni
calendarios para la renovación, pese a que voces como la presidente del
partido, José Antonio Griñán, o el dirigente castellano-manchego, Emiliano García-Page,
han hablado fuera de la necesidad de establecer como mínimo un calendario de
primarias para elegir al futuro candidato a la Presidencia del Gobierno. De
este tema no quieren oír ni hablar ni Rubalcaba ni sus peones más fieles, como
Elena Valenciano, Oscar López o Antonio Hernando, pero tampoco, por lo que se
ve, otros dirigentes como el vasco Patxi López o el gallego Pachi Vázquez.
En todo caso, en la Ejecutiva
de este lunes no ha surgido, al parecer, la discrepancia más allá de la
'reflexión' 'crítica' o 'autocrítica' que ha realizado Griñán en su rol de
presidente del partido. Ahora de lo que se trata es de conformar una
alternativa política, incluso sin conocer quién será el presidenciable para las
elecciones de 2015: "Ahora no toca", es la manida frase de un Pérez
Rubalcaba que dice que todos sus compañeros de Ejecutiva le han mostrado su
apoyo de forma unánime.
En todo caso, el líder
socialista aseguró luego ante la prensa que lo primero que tiene que hacer el
Partido Socialista es "hacer una reflexión ideológica de fondo, diseñar un
nuevo proyecto político, reforzarnos orgánicamente y abrirnos al conjunto de
los ciudadanos", algo que tiene que ver con las Conferencias políticas
pendientes de celebrar y con la labor de oposición.
Es decir, que según él,
lo único que hay que hacer es "acelerar" los calendarios para "ir más rápido en
la elaboración de una alternativa que este país necesita urgentemente", porque
esta "no es una legislatura normal", ya que "el Gobierno lo está poniendo todo
patas arriba" y la gente necesita ver cuál es la posición de los socialistas y
qué políticas defendemos. La pregunta es: ¿Se puede hacer esa alternativa sin
conocer siquiera quién será el candidato socialista a la Presidencia del
Gobierno? La respuesta de Rubalcaba es clarísima: "Naturalmente que
sí". No hay más que hablar.
La brecha abierta en el
PSC
El problema que más
preocupa ahora, más allá de una renovación de la dirección federal que parece
que nadie quiere, es la brecha que el Partido Socialista de Cataluña parece
estar abriendo dentro de la gran familia socialista en torno al debate sobre la
independencia catalana. En concreto, hay un punto en la propuesta del PSC que
no gusta ni al propio Rubalcaba: ese 'derecho a decidir' de los catalanes que
el primer secretario del PSC ha consignado sin más en su programa electoral.
Pero el problema ya ni siquiera
se centra ahí: se seguirá hablando y se llegará a una solución pactada, sin
duda -nadie piensa en una ruptura, ni mucho menos-. El problema es más de
fondo, como ha puesto de relieve dentro de la Ejecutiva de este lunes el propio
Griñán: el debate sobre la reforma constitucional es tan amplio, que 'todos'
tienen que participar en el mismo y que no puede quedarse en una cosa entre
'Madrid y Barcelona'.
Y todos son conscientes
de que ya ni siquiera vale ese concepto primitivo de las 'comunidades
históricas', porque era un concepto válido para la transición, cuando se
descartó, pero no ahora después de treinta años de desarrollo del café para
todos.
Más allá de la
formulación de Griñán, y de la aceptación implícita del problema por parte de
Rubalcaba, nadie sabe cómo se va a articular ese debate, pero lo que sí parece
claro en estos momentos es que PSOE y PSC discrepan respecto al derecho a
decidir que plantean los socialistas catalanes, "aunque entendemos que
corresponde a un debate que está muy vivo en Cataluña". En cualquier caso,
según Rubalcaba, "lo más importante" es que tanto el PSC como el PSOE "estamos
firmemente unidos" y "decimos: No a la independencia de Cataluña", pues "lo bueno
para ambas es que haya unidad".