Los acampados pro-consulta vuelven a la plaza de Catalunya pese a la prohibición policial

Los manifestantes de la acampada a favor de la consulta del 9 de noviembre volverán a plantar hoy tiendas para pasar la noche en la plaza de Catalunya de Barcelona, pese a que la policía se las requisó anoche, en una actuación que han calificado de "violenta" y que les obligó a dormir al raso.

Bajo el lema "Desobeïm" (Desobedezcamos), la plataforma "Independencia para cambiarlo todo" -que agrupa a diversos colectivos de la izquierda independentista- ha hecho un llamamiento a la colaboración y a la participación ciudadana, para que acudan con tiendas de campaña y el material necesario para pasar la noche.

La intención, tras la acordado por unas 150 personas en la asamblea de ayer, es permanecer en la céntrica plaza de Barcelona hasta el domingo y, a partir de entonces, decidir si es más práctico estar en la plaza "o estar más dispersos de cara a seguir con las acciones de la campaña de forma efectiva".

Así lo han asegurado dos de los portavoces de la campaña, Joan Sebastià y Maria Rovira, en una rueda de prensa esta tarde en el lugar de la acampada, donde hoy ya han instalado un pequeño escenario para conciertos, carteles y pancartas en árboles y vallas, así como una urna de grandes dimensiones con el lema "Votaremos sí o sí".

"Nuestro objetivo es alterar el normal funcionamiento de las instituciones del Estado y la vida pública, porque en una situación como en la que estamos es imposible aceptar la normalidad. Entre nosotros y la autodeterminación solo hay la desobediencia como método", ha señalado Sebastià.

Después de que ayer situaran una veintena de tiendas para pasar la noche en la plaza, agentes antidisturbios de la Brigada Móvil de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Urbana acudieron al lugar a las dos de la madrugada y les requisaron las tiendas, algo que no evitó que unos cuarenta manifestantes decidieran pasar la noche durmiendo al raso.

Sebastià ha calificado de "violenta" la actuación policial con el objetivo de "arrancarles" las tiendas, pero ha reconocido: "El hecho de que haya la consigna de no sacar las porras demuestra que al Govern la situación le resulta políticamente incómoda".

"Si nos intentan sacar fuera, resistiremos", ha apuntado Rovira, que ha destacado que "la desobediencia ha sido la herramienta más poderosa que ha hecho avanzar la sociedad en derechos".