Una vez confirmada la finalización de la recesión, lo peor de la crisis, el rescate bancario y el comienzo de los brotes verdes,
Mariano Rajoy tiene el campo libre para hacer cambios en su Ejecutivo sin que parezca que esté enmendando sus propios errores.
La gestión del presidente del Gobierno desde que accediera al poder en diciembre de 2011 ha pasado por exigirse una imagen impoluta, sin ceder a ninguna demanda de destituciones o dimisiones, y el empeño por asegurar que España y su poder ejecutivo tienen la autoridad suficiente como para gestionar la crisis sin ayuda externa ni admitir presiones foráneas.
Ahora bien, ya sin esas presiones, y cerca de las
elecciones generales de 2015 y aún más si cabe de las elecciones europeas del próximo mes de mayo, Rajoy tiene pensado dar un cambio radical a su Consejo de Ministros, como es costumbre en nuestra reciente historia democrática, pasada la mitad de la legislatura o a cerca del término de la misma.
Según el confidencial de 'La Linterna' de la Cope, siguiendo fuentes del PP y Gobierno, Rajoy acometerá tal crisis de gobierno en el mes de febrero, ni antes ni después, aunque haya muchas presiones y consejos internos para adelantarla. El presidente mide los tiempos y quiere que sea en ese instante para que tenga el efecto justo de cara a los comicios europeos de mayo.
Este programa no dio nombres, pero apuntó a que finalmente Rajoy recuperará la figura del vicepresidente económico, importantísima desde la era Aznar con
Rodrigo Rato, y de sobra conocida por Rajoy. Antes la había creado
Adolfo Suárez en 1977 al nombrar como Vicepresidente Segundo y Ministro de Economía a
Enrique Fuentes Quintana, y posteriormente a
José María Aznar el ex presidente
Zapatero repitió fórmula con
Pedro Solbes y con
Elena Salgado. Rajoy, por contra, prefirió unificar todo el 'segundo mando' en la Vicepresidenta
Soraya Sáenz de Santamaría, de total confianza de su persona.
Los cambios concretosAdemás, en la Cope se habló de 4 cambios ministeriales en total, afectando a las carteras de Justicia, Educación, Sanidad y Agricultura. En el caso de
José Ignacio Wert, muchos creen que era cuestión de tiempo y que Rajoy ha retrasado su relevo para retrasar también el fiasco de la arriesgada elección en su momento.
Ana Mato también era una baja segura, contaminada por los daños colaterales del 'caso Gürtel' que han afectado a su ex marido,
Jesús Sepúlveda, y los recortes en Sanidad.
Caso bien distinto es la cartera de Justicia, lo cual sería una magna sorpresa puesto que a
Gallardón se le considera un político muy popular y un factor atrayente de votos.
Y ya la situación del cuarto afectado,
Miguel Arias Cañete, es bien distinta. Este veterano de 'guerra' busca un final de carrera tranquilo por su edad y dejaría la cartera de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente para liderar la candidatura del PP en las elecciones europeas y convertirse dentro de más o menos un año en Comisario Europeo. Una guinda perfecta a su vida política.
Lea también:-
'La ya inevitable crisis de Gobierno', por Fernando Jáuregui