Más
de 500 expertos externos han intervenido en su redacción
Monarquía, reforma de la Constitución, listas abiertas y primarias generalizadas, base de la estrategia política del PSOE
-
Supresión de subvenciones privadas a partidos, democratización del parlamento y
Estado federal
- Inclusión en la Constitución de derechos inalienables, como el de la Sanidad
jueves 04 de julio de 2013, 10:36h
El
documento sobre el que trabajará la Conferencia Política del PSOE el próximo
mes de octubre plantea cambios auténticamente revolucionarios para regenerar la
política y la sociedad española. Es verdad que mantiene la monarquía frente a
las tesis de una III República, pero plantea cambios radicales en la
Constitución, Cortes Generales, fiscalidad nacional e internacional, partidos
políticos, financiación y hasta en la representatividad, donde apuesta por
listas abiertas y sistema generalizado de primarias. Lo dicho, una revolución.
El
coordinador de los trabajos para la Conferencia Política que el PSOE celebrará
el próximo mes de octubre y que definirá la estrategia del partido, Ramón
Jáuregui, tiene prácticamente ultimado un documento-resumen de 300 folios en
cuyos trabajos han participado más de 500 expertos externos. Este documento
plantea, en siete grandes apartados, unos cambios verdaderamente
revolucionarios para regenerar la vida político-social-económica del país.
El
primer gran apartado es el de la igualdad, en el que se plantea que en los
últimos años ha crecido el número de ricos, pero ha crecido aún la diferencia
entre estos y los pobres, lo que ha roto el pacto establecido tras la II Guerra
Mundial. Es decir, el llamado 'pacto socialdemócrata' por el que se garantizaba
paz social a cambio de bienestar.
Así
las cosas, el documento socialista plantea en términos generales abordar una
gran reforma fiscal con progresividad respecto a los ingresos -lo contrario de
lo que plantean los 'nuevos integristas' del PP agrupados con Aznar en FAES-,
dar un golpe de timón progresista a la redistribución de la riqueza a través
del gasto público, y propiciar un corte radical en las brechas abiertas en el
origen salarial: es decir, que no puede existir tanta diferencia en los
ingresos, por ejemplo, entre ejecutivos y empleados.
El
problema de la izquierda con la globalización
El
segundo bloqueo está dedicado a las políticas progresistas a realizar respecto
a la globalización, dado que, en palabras de Ramón Jáuregui, se parte de de la realidad
de que "a más globalización menos democracia". El documento insiste en que "hay
que democratizar la globalización"; es decir, trabajar hacia un gobierno global
con competencias para la redistribución.
Se
apuntan dos grandes direcciones al respecto. Una primera pasa por revisar el
sistema fiscal internacional, destruyendo los paraísos fiscales, imponiendo
impuestos a las grandes fortunas y, desde luego, a que quien evada capitales de
un país por llevarlo a otro, pague allí elevados impuestos.
Una
segunda línea pasa por involucrar a las empresas en la 'dignidad humana',
laboral, medioambiental y por el bien común.
Reforma
de las reglas democráticas
El
tercer gran apartado proyecta una reforma en profundidad del sistema para
regenerar la vida democrática, que pasa, en primer lugar, por un amplio acuerdo
con el Gobierno para elaborar una 'verdadera' ley de transparencia que,
acompañada de un paquete global de medidas, actúe como freno ante la
corrupción.
Entre
las medidas propuestas se encuentra la reforma de la ley de partidos políticos,
en la que se propone la eliminación de las subvenciones privadas,
contrarrestando esa medida con una adecuada reforma de las subvenciones
oficiales.
En
cuanto al Parlamento, el documento prevé unas Cortes Generales más
democráticas, que 'blinden menos' al Gobierno y actúen de contrapeso real, con
un Senado reconvertido en Cámara Territorial en un Estado más federal, y con un
Congreso en el que cuyo Reglamento debe ser reformado en profundidad para,
entre otras cosas, dar mayor presencia a las organizaciones sociales. Se prevé
también la creación de la 'oficina del diputado' para que sus señorías puedan
estar bien presentes en sus circunscripciones respectivas.
Se
prevé también la reforma de la ley electoral para que obligar a que los
candidatos a puestos ejecutivos se elijan en elecciones primarias; se abren las
listas electorales, que dejarían de estar cerradas y bloqueadas; se impone la
paridad, y se favorece el voto de los extranjeros residentes en España.
Defensa
de los valores de la izquierda
El
cuarto gran grupo de medidas se refiere a la recuperación de los valores de la
izquierda, bajo la base de que "no hay sociedad, hay individuos". En este
punto, que engarza en cierta forma con el primero, se prevén 'empresas
razonables' en su trato con los trabajadores -leyes ad hoc de por medio-,
aumento de la calidad de vida con medidas concretas, de urbanismo y ciudad,
etc. En definitiva, que "hay que reforzar la fuerza moral de nuestros ideales".
Regeneración
de España
En
el quinto gran apartado se propone una auténtica regeneración territorial
frente a las tendencias recentralizadoras y sus contrarias, las separatistas;
tendencias producto de problemas que el actual modelo no ha sabido resolver en
estos 35 años de democracia.
Se
propone grandes medidas como cambiar radicalmente la concepción del Senado para
que sea una Cámara territorial en un Estado federal y clarificar en un artículo
en la Constitución las competencias: cuáles son del Estado y cuáles de las
comunidades autónomas. Todo esto implica una reforma de la Constitución, pero
manteniendo el régimen de Monarquía parlamentaria. Es decir, no rotundo a los
postulados de la III República que parten de la izquierda real.
Situación
económica de España
Un
bloque muy importante es el dedicado a la situación económica de España, donde
se critica el ajuste fiscal realizado por el Gobierno de derechas de Mariano
Rajoy, así como su perniciosa reforma del mercado laboral, aspectos ambos que
se descalifican en estos trabajos.
Se
rechaza igualmente la devaluación de los trabajos y de los derechos laborales y
sociales que ha tenido lugar con la derecha que representan Rajoy y sus
acólitos y se señala sin ambages que España corre el riesgo de que el 20 % de
su población acabe en la pobreza extrema.
Frente
a lo anterior, el documento que se estudia propone acabar con las diferencias
que está estableciendo el PP desde el poder, por ejemplo, con medidas
extremosas como la LOMCE de José Ignacio Wert, la reforma judicial -tasas incluidas- del
ínclito Alberto Ruiz-Gallardón -quizá el peor de los ministros de Rajoy-, el
parón a la ciencia y a la investigación, la "escandalosa" privatización de la
Sanidad pública y un largo etcétera.
Así
que, para que los derechos de los derechos de los españoles no vuelvan a ser
pisoteados por otro gobierno similar al de Rajoy, o aún peor, el documento
socialista propone un último bloque que contiene una reforma de la
Constitución, en la que se deben incluir de forma explícita derechos
inalienables como el derecho a la Sanidad.