Cuatro policías -dos de la escala básica
y dos comisarios- que tuvieron la 'osadía' de investigar la legalidad del ático
del presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, fueron cesados
fulminantemente por el ministro del Interior. Ahora, tras el auto de imputación
de la mujer de González, Lourdes Cavero, el Sindicato Unificado de Policía, que
forma parte de la acusación popular, exige a Fernández Díaz explicaciones por
esos ceses. Nueva tormenta, pues, en Interior.
El poder tiene muchos tentáculos, y eso
lo aprendió en sus propias carnes el comisario
José Enrique Rodríguez Ulla,
hasta julio de 2012 comisario general de Policía Judicial, que fue cesado
fulminantemente en esa fecha por el director general de la Policía,
Ignacio
Cosidó, sustituyéndolo por un supuesto 'afín', el comisario principal
José
García Losada, hasta ese momento director del Centro de Inteligencia contra el
Crimen Organizado (CICO).
Como ya
reveló Diariocrítico en su
momento, el hecho es que, según fuentes policiales, Cosidó cesó a Rodríguez
Ulla porque este comisario tuvo la
osadía de investigar una denuncia del
Sindicato Unificado de Policía (SUP) contra el entonces todopoderoso número dos
de
Esperanza Aguirre,
Jaime Ignacio González González, actual presidente de la
Comunidad de Madrid en sustitución de la propia Aguirre. La denuncia del SUP contra
González -sobre la que
Diariocrítico informó plenamente en su día- estaba
basada en el alquiler de un ático de lujo en Marbella por este personaje, cuyo
inmueble no tenía clara entonces la titularidad.
La denuncia fue archivada inicialmente por
la Fiscalía Anticorrupción, y en cuanto llegó ese archivo, Cosidó cesó de forma
fulminante al osado comisario Rodríguez Ulla, que pasó a situación de espera de
destino.
Pero no fue la única 'víctima' del ático
de Ignacio Aguirre y de su mujer,
Lourdes Cavero, porque también fueron cesados
dos policías nacionales de Marbella que habían investigado el ático en
cuestión, e igual suerte corrió el comisario de Marbella
Agapito Hermés.
La historia de ese último caso tuvo '
guasa':
Hermés fue cesado en Marbella y nombrado comisario de la Comisaría de
Moncloa-Aravaca. Pero dio la casualidad de que ése justamente era el distrito
donde vivía Ignacio González, y pocas horas después de su nombramiento en esa Comisaría, le relevaron para nombrarle segundo comisario en la de Usera,
también en Madrid, pero en un barrio mucho más conflictivo.
Ahora, tras confirmarse que algo no
huele bien en todo ese asunto del ático, el Sindicato Unificado de Policía
(SUP) ha exigido explicaciones al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz,
y al director general de la Policía, Ignacio Cosidó, por esos ceses.
Lean también:
>>
Auto de imputación de Lourdes Cavero>>
Lea de forma íntegra la nota del SUP sobre el cese de Rodríguez Ulla>>
Lea la denuncia del SUP relativa a Ignacio González>>
Lea la carta-denuncia del SUP al Comisario General>>
Lea el archivo de la causa por la Fiscalía Anticorrupción