La Comisión Europea ha reculado, pero clama al cielo que hubiera aprobado un vídeo promocional como éste. El anuncio 'Creciendo juntos' termina con un buen lema, "cuantos más seamos, más fuertes seremos", pero el poso que realmente queda no puede ser más perverso.
Una mujer blanca hace de Unión Europea travestida de Uma Thurman y es rodeada por sus enemigos: un hombre asiático, un sultán que levita y un hombre negro que baila kapoeira.
Si bien la 'heroína' acaba optando por la meditación en lugar de la violencia y acaba rodeando a dichos personajes, supuestamente a modo de abrazo, no deja de resultar un mensaje absolutamente maniqueísta y lleno de prejuicios.
Los aires de superioridad neocolonialista son evidentes, por no hablar de la cantidad de europeos con rasgos no caucásicos que podrían haberse sentido discriminados por la promoción del estereotipo 'occidental' puramente racista.
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