Así el límite sería de un tercio del objetivo global en proporción al gasto que soportan las autonomías
Cataluña reacciona al límite del déficit y pide que el de las autonomías se eleve a 2,1%
viernes 26 de abril de 2013, 20:39h
El consejero de Economía y Conocimiento de la Generalitat de Cataluña,
Andreu Mas-Colell, ha pedido este viernes un objetivo de déficit en 2013
del 2,1% en vez del 1,2% previsto para las autonomías por el Gobierno,
para que el límite sea de un tercio del objetivo global en proporción al
gasto que soportan las autonomías.
En declaraciones a la prensa para valorar el Consejo de Ministros, ha
lamentado que el 1,2% "no es ni la tercera parte del aumento de margen
del déficit total", ya que entonces sería de un 1,3%, y ha incidido en
que al margen del objetivo autonómico general, todavía falta saber cuál
será el objetivo para Cataluña.
En este sentido, ha reivindicado que esta decisión, que confía en
que llegue pronto, es responsabilidad del Gobierno y no de ningún grupo
de trabajo multilateral "que no está estructurado para tomar ninguna
decisión sobre estos temas".
Presupuestos pendientes
En todo caso, ha afirmado que la Generalitat "no está
contemplando" un 1,2% de déficit para elaborar sus presupuestos de 2013
porque es lógico que sea superior, y que todavía no puede avanzar cuándo
los presentará al Parlament porque todavía no hay una cifra de déficit
cerrada.
Ha lamentado que el Gobierno central mantiene su política de
"adelgazamiento asimétrico" de las administraciones, ya que con el
planteamiento que ha hecho público este viernes, la Administración
central --incluyendo la Seguridad Social-- debe rebajar a la mitad su
déficit entre 2013 y 2016 (del 5,1 al 2,5%), mientras que las autonomías
lo deben dividir diez veces (del 1,2 al 0,2%).
"Lo lamentamos porque no tiene en cuenta los enormes sacrificios
en sanidad, educación, y otras responsabilidades que tienen las
autonomías, responsabilidades que no son menos importantes que las que
tiene el Estado", ha expuesto.
En esta línea, ha deplorado que la Administración central no ha
anunciado ninguna reducción salarial a los funcionarios para este año,
mientras que Cataluña ha tenido que repetirla: "No es una actitud que
cree complicidades. Es una actitud de que quien remueve la olla se queda
el mejor trozo".
Tesorería
Ha recordado que la disponibilidad de tesorería de Cataluña
dependerá del objetivo de déficit autorizado, y ha vuelto a reivindicar
un plan "consistente y fuerte de liquidez para proveedores, sea FLA, ICO
Proveedores o planes nuevos", porque si se pretende que la Ley de
morosidad se aplique para inyectar liquidez en el sector productivo, las
autonomías necesitan liquidez suficiente.
Ha instado al Gobierno a aprovechar que en estos momentos el
acceso a los mercados del Gobierno español es bueno y la prima de riesgo
está bajando "para dar liquidez a las autonomías y especialmente a
Cataluña".
A la espera de conocer los detalles de las reformas anunciadas
este viernes por el Consejo de Ministros, no ha valorado medidas como la
previsión de reducción de convenios que financian servicios públicos o
la aplicación de un impuesto sobre los depósitos --hasta ahora fijado en
el 0%--.
Más duro que Mas
El consejero ha sido más duro en su valoración que el presidente
de la Generalitat, Artur Mas, que ha celebrado el mediodía de este
viernes que el Gobierno central proponga un incremento del techo de
déficit de las comunidades autónomas del 0,7 al 1,2%, pero ha
considerado que esta cifra todavía "no es suficiente".
El Gobierno ha anunciado la mañana de este viernes que el objetivo
de déficit español para este año será del 6,3% (en lugar del 4,5%
pactado con la UE), mientras que se reducirá al 5,5% en 2014, al 4,1% en
2015 y al 3% en 2016.
La Comisión Europea ha avalado que España retrase dos años, hasta
2016, el objetivo de reducir el déficit hasta el 3% del PIB teniendo en
cuenta la "difícil situación económica".
No obstante, antes de dar su autorización oficial a esta prórroga,
el Ejecutivo comunitario quiere examinar si la nueva senda de ajuste
fiscal propuesta por el Gobierno de Mariano Rajoy se basa en "un número
suficiente de medidas estructurales y de alta calidad".