El Rey está muy enfadado consigo mismo por la imagen que dio en el discurso de la Pascua Militar, donde lo más destacado fueron sus
achaques y titubeos. Fue el propio monarca el que se empeñó en salir públicamente pese a su escaso periodo de recuperación posoperatoria, pero el atril le jugó una mala pasada. De hecho, hasta el día del
discurso de Nochebuena el 24 de diciembre se encontraba con muchas más fuerzas, pero la relajación de las fiestas le pasaron factura. Esta es la versión de Zarzuela que ya ha encargado un nuevo apoyo con luz incorporada para evitar que la mala visibilidad vuelva a provocar dificultades de lectura al Rey.
Su aparición fue un resbalón mediático, pero
don Juan Carlos está dispuesto a darse una segunda oportunidad. Según confirman a
Diariocrítico fuentes cercanas a la Casa Real, probablemente, lo hará por partida doble. En su agenda está ya una próxima reaparición pública en unas 2 o 3 semanas con motivo de la tradicional recepción al cuerpo diplomático y, además, a principios de febrero el Rey pretende viajar a Portugal donde se celebrará la cumbre empresarial de COTEC a la que acudirán los jefes de Estado y de Gobierno de España, Italia y Portugal.
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