www.diariocritico.com

Perfil político del ganador en las primarias socialistas de Madrid

Tomás Gómez, un  líder hecho a sí mismo

Tomás Gómez, un líder hecho a sí mismo

martes 05 de octubre de 2010, 16:05h
Cuentan que lloró tras conocer el resultado de las primarias. Algo inusual en un líder con fama de duro, tan duro como la kriptonita, el mineral con el que él mismo se comparó al anunciar que estaba dispuesto a cumplir su palabra y a ser el candidato del PSM a la presidencia de la Comunidad de Madrid hace apenas un par de meses. Y hasta en eso acertó porque la noche del pasado domingo, cuando supo que la militancia le había elegido a él y no a la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, Tomás Gómez descubrió ante los suyos su flanco más débil, despojándose de ese traje de superman que ha llevado puesto durante todo este tiempo desde que decidió plantar cara a Zapatero y seguir adelante con sus planes contra viento y marea.
Y si su  primera ‘proeza’ -o principal activo, como malévolamente dijo Alfredo Pérez Rubalcaba- fue decir ‘no’ al todopoderoso lider del PSOE y presidente del Gobierno,  su gran hazaña  ha sido dar en tan poco tiempo un espectacular vuelco a su carrera política ganando el órdago de las primarias. El resto piensa echarlo el 22 de mayo, fecha en la que se enfrentará en las urnas a su rival ‘verdadera’, Esperanza Aguirre, contra la que lleva tres años disparando su escopeta recorriendo, incansable, Madrid en su autobús electoral para denunciar “sus incumplimientos”. Es su manera de suplir el handicap de no poder mantener con la lideresa duelos parlamentarios ya que Tomás Gómez no tiene escaño en la Asamblea madrileña. 

Y con la misma fe en sí mismo que demostró Obama, o el propio Zapatero, -no en vano le han comparado desde el principio con él-  el secretario general del PSM está convencido de que verá cumplido su sueño y se convertirá la próxima primavera en el presidente de la Comunidad madrileña. Un sueño que no es tan descabellado si se estudia más de cerca al personaje.

Nacido en Enschede, Países Bajos, el 27 de marzo de 1968, Tomás Gómez siempre recuerda su origen humilde, de familia emigrante, cuyos padres tuvieron que trabajar  mucho para darle estudios, oportunidad que aprovechó  licenciándose en Ciencias Económicas en la Universidad Complutense y especializándose en Política Monetaria y Sector Público. También cuenta con el doctorado con una tesis sobre la gestión sanitaria. Ingresó en el PSOE muy joven, con apenas 20 años, implicándose  activamente en las Juventudes Socialistas. Su trayectoria política es bien conocida. Desde 1999 ha conseguido dos mayorías absolutas como alcalde de Parla, su ‘pueblo’, en donde tuvo que fajarse con rivales también en primarias. En 2007 dejó el cargo para presentarse a la secretaria general del PSM con el aval de Zapatero y fuertes reservas de José Blanco que jamás le ha visto como una ‘joven promesa’, como suele describirse a los JASP de la política. Hubo un primer Congreso Extraordinario tras la dimisión de Rafael Simancas en julio de 2007 en el que superó a sus dos contrincantes en avales, el guerrista José Cepeda, y el concejal Manuel García Hierro. Un año después, en septiembre de 2008, se celebró otro congreso ordinario del que salió ratificado como líder del PSM arropado por un entusiasmado Zapatero, que ya era presidente del Gobierno. Durante estos tres años en el cargo bien es verdad no ha conseguido labrarse una buena imagen ni ser un político demasiado conocido entre los madrileños... hasta que dio el paso adelante y se enfrentó con la ministra - la candidata de Zapatero- a estas primarias. A estas alturas todo el mundo sabe ya quien es Tomás Gómez.



Sobre su carácter hay discrepancias. Sus más estrechos colaboradores aseguran que es verdad que es un hombre callado y algo reservado, pero dicen que en las distancias cortas gana y destapa su perfil más amable y cercano a la gente con la que ‘empatiza’ con facilidad. Que tiene 'don de gentes', vamos, y no olvida una cara y sus problemas. También destacan su sentido del humor poniendo como ejemplo que es un gran contador de chistes. En su trabajo es metódico, con algunas manías, lo que ha desatado alguna que otra broncas. Pero sabe escuchar a su equipo en el que se ha apoyado en estas primarias atendiendo a sus consejos pese a que al final, como casi todos los dirigentes de los partidos, él decide si seguirlos o no, poniendo su  ‘toque’ personal a cada acción política.  

Sus detractores, en cambio, le pintan como una persona fría, que no olvida nunca una ‘afrenta’ y aseguran que cuando quiere ser frío no lo disimula aunque ponga su 'falsa sonrisa' . Además, le critican el haber marginado a los que no ‘le bailan el agua’. Algo que indigna a sus más cercanos que recuerdan que ha integrado a Cepeda en su Ejecutiva como hizo con su rival interna en Parla a la que designó primera teniente de alcalde cuando perdió las primarias.

Por lo demás, cuida mucho su salud, no fuma, ni bebe,  va a menudo al gimnasio - se ha ganado incluso fama de vigoréxico, lo que desmiente tajantemente-, y no le gusta que nadie hurgue en su vida familiar y privada por lo que pocos son los que saben que estaba casado y se ha separado. Entre sus aficiones están las motos con las que hace escapaditas por la sierra madrileña para relajarse. Pero su ‘niña bonita’ es una antigua vespa que mima mucho y que arregló él personalmente cuando se la regalaron y de la que siempre presume.

Ahora comienza una trepidante y arriesgada etapa política. Todo un nuevo reto. Sabe lo que se juega si pierde frente a la lideresa. Ahí le esperan, no hace falta decir quienes. Pero a lo que seguro que sigue dándole vueltas a la cabeza  tanto él como sus fieles es porqué en estos pocos meses ha caido ‘en desgracia’ ante el líder de su partido y le han sometido a esta dura prueba. Como en la película de Almodóvar, ‘¿Qué he hecho para merecer esto?’. ¿Quizá parecerse demasiado a Zapatero...?


- Lea también:
Opinión:
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios