El equipo económico de Rajoy cumple
Para que luego digan que los asesores de los dirigentes políticos no son eficaces.... El diputado del PP,
Álvaro Nadal, que forma parte del equipo económico que dirige
Cristóbal Montoro, se apresuró este miércoles a hacer las cuentas para que
Mariano Rajoy pudiera utilizar en el debate la cifra de cuánto va a suponer la subida de impuestos del 1,5 % del PIB anunciasda momentos antes por
Zapatero. Nada menos que 15.000 millones de euros. Con el papel que Nadal le dejó en el escaño Rajoy atacó a Zapatero sin misericordia.
Luego, en los pasillos, pudo verse a Nadal ampliando datos a un grupo periodistas para que supieran y destacaran, lógicamente, lo que les espera a los españoles con la anunciada subida de impuestos de Zapatero. Todo un ejemplo de eficacia.
La "complicidad amistosa" de Bono
La bancada popular, y especialmente su portavoz,
Soraya Sáenz de Santamaría, andaba muy enfadada por los pasillos del Congreso porque cuando le tocaba replicar a
Mariano Rajoy en el debate sobre economía, las pantallas de los monitores del hemiciclo -también las de la sala de prensa- se quedaron sin imagen ni sonido. El fallo técnico provocó que Sáenz de Santamaría hiciera un gesto desde su escaño de desaprobación y protesta al presidente
José Bono, con el que posteriormente anunció que pensaba hablar.
Y es que, se quejan los populares, no es la primera vez que ocurre un incidente similar justo cuando le toca subir a la tribuna al jefe de la oposición.
Para que no se llevaran los del PP esta impresión, también sufrió las incidencias de la técnicas el propio presidente del Gobierno. Justo cuando le tocaba replicar al líder de la Oposición en la sesión control al Gobierno, Bono les advirtió de que no funcionaba el reloj que marca el tiempo de uso de la palabra de los diputados. El presidente del Congreso 'solucionó' la situación asegurando que ante
"la enemistad técnica manifiesta", los oradores, en compensación, tendrían
"la complicidad amistosa" del propio presidente, momento en que volvió a cortarse la señal y la imagen desapareció de los monitores. ¿Serán la meigas?
Cayo Lara (IU) 'invitado de piedra' al debate económico
El coordinador de Izquierda Unida,
Cayo Lara, no quiso perderse el debate económico que se celebra este miércoles en el Congreso y que tanta expectación ha despertado. Lara acudió al Congreso, ocupó un sitio en la tribuna de invitados rodeado de su guardia pretoriana, y estuvo muy atento a las intervenciones del presidente y todos los portavoces de los grupos parlamentarios, especialmente a la de
Joan Herrera,que en esta ocasión fue el encargado de subir a la tribuna en lugar de
Gaspar Llamazares con el que, a falta de grupo propio, se turna en los debates repartiéndose el tiempo como buenos aliados.
Rajoy menta ‘la bicha’ a Zapatero
Estaba claro que el líder de la oposición,
Mariano Rajoy, no iba a dejar pasar la oportunidad de oro que, el pasado domingo, el diario
El País le puso en bandeja en su suplemento de
Negocios con un amplio y demoledor reportaje sobre la situación económica y supercrítico con el Gobierno que titulaban
“A la deriva”. Su contenido parecía un calco de las críticas que vienen haciendo los populares a la política económica del Gobierno desde hace meses.
La alusión fue especialmente ‘dolorosa’ para
Zapatero dado que hasta hace muy poco -la concesión de licencias de la TDT, sin llegar más lejos- el diario del grupo Prisa había mantenido cierta complacencia con su gestión. El articulo de marras, con el que se desayunó Zapatero camino del mitin de Rodiezmo, hizo tanta mella en el presidente que condición a todas luces su discurso en la fiesta minera, de la que salió la controvertida foto del ‘puños en alto’ que, aunque se repite año tras año, no se sabe bien porqué ha sido tan comentada y criticada esta vez.
Pues bien, al final de su primera intervención en el debate, Rajoy puso la puntilla a su discurso, no menos demoledor, y le dejó caer:
“Como titulaba un diario nacional, -en alusión clarísima a
El País- estamos 'A la deriva', “una recesión más larga que Europa con un Gobierno errático en su política económica”. A Zapatero se le torció el gesto.
Zapatero, con puntualidad británica, pese a las obras
Ni
Gallardón con sus eternas obras que tienen empantanado Madrid, pudo impedir que el presidente
Zapatero llegara este miércoles al Congreso de los Diputados con puntualidad británica para protagonizar el esperado pleno parlamentario sobre la crisis económica, el primer gran debate tras las vacaciones de verano.
El jefe del Ejecutivo apareció por el patio del Congreso -remodelado también, por supuesto- 10 minutos antes de las nueve de la mañana, entre en el ensordecedor ruido de las máquinas taladradoras que trabajan en la carrera de San Jerónimo sin descanso.
No todos los diputados tuvieron tanta ‘suerte’ como Zapatero -ningún motorista les abre el paso como a él, claro- y fueron muchos los que llegaron una vez empezado el discurso del presidente.
Besos y más besos ‘desafiando’ a la gripe
Como si fuera el primer día, algo que para algunos diputados realmente era verdad porque ayer, en el primer pleno del nuevo periodo de sesiones, bien es verdad que hubo muchas ausencias.
El caso es que fuimos testigos de cómo sus señorías se besaban al verse tan contentas ‘desafiando’ la gripe A y sin acatar el protocolo difundido por la ministra de Sanidad,
Trinidad Jiménez, quien, por cierto, también repartió ósculos a diestro y siniestro contraviniendo – como hace habitualmente- sus propias recomendaciones sanitarias. "Es que somos todos de confianza", bromeaba luego un veterano diputado.
Una de las que más se prodigó en besos fue la portavoz del PP,
Soraya Sáenz de Santamaría, muy morena y con un aspecto todavía bastante ‘relajado’. Cosa curiosa, el PP es, de momento, el único grupo parlamentario que tiene diseñado un protocolo de actuación ante un posible contagio... ¿Y el resto de la Cámara?