En este sentido, la vicepresidenta primera,
Maria Teresa Fernández de la Vega, lo advertía al comienzo de la rueda de prensa para explicar las grandes cuentas del estado para 2010:
" no perdemos ninguna seña de identidad del Gobierno,". Es decir, mantienen la prioridad del Partido Socialista en materia de política social.
Gasto social
En este sentido, es de destacar, que el 51,6% del presupuesto se dedica al gasto social, el 21% a transferencias a otras administraciones públicas que ven garantizadas, de esta manera, sus necesidades de funcionamiento prometidas en el acuerdo en materia de financiación autonómica, y los futuros compromisos en materia de financiación local, y el 6,3% a investigación, desarrollo e innovación, el otro capítulo presupuestario en el que el Gobierno no ha querido recortar gastos porque, según la vicepresidenta económica,
" es importante aprovechar esta situación para generar un nuevo modelo económico basado en la innovación tecnológica". El departamento que dirige
Cristina Garmendia, Ciencia y Tecnología, y el de
Miguel Sebastián, Industria, son los que, en tal sentido, salen más reforzados.
El 6,6% del presupuesto se dedicará al pago de la deuda contraída, el 6,2% a justicia y orden público, - los otros departamentos más beneficiados en este presupuesto "austero", y el 8% a otras actuaciones económicas.
Retribuciones
El capítulo de gastos de personal crece un 2,7% basándose en un incremento de las retribuciones de los empleados públicos del 0,3%, tal y como se ha previsto en el Pacto de la Función Pública suscrito este viernes pasado por la Vicepresidenta Fernández de la Vega con los sindicatos. Se congelan por segundo año consecutivo, los sueldos de los altos cargos, y, también por segundo año consecutivo, se reduce la oferta de empleo público.
Los gastos corrientes aumentan, aunque de forma apenas apreciable y debido a que el año que viene hay que hacer frente a un acontecimiento tan importante como es la presidencia española de la Unión Europea.
Inversiones
En materia de transferencias corrientes, el presupuesto desciende un 7,3% y también disminuye el capítulo dedicado a inversiones aunque, desde el Ministerio de Fomento se han encargado de matizar que " esta disminución de las inversiones no afectará a las infraestructuras, que se seguirán potenciando, y que será el tercer eje de actuación tras las políticas sociales y las que potencian la innovación tecnológica".
Fuentes consultadas por diariocritico, apuntan a que para financiar las infraestructuras previstas, tal como pueden ser las obras del AVE o la ampliación del número de kilómetros de autovías, se puede lograr vía extrapresupuestaria mediante el denominado "modelo alemán" que practicó Rodrigo Rato, en la primera etapa de mandato de Aznar como presidente del Gobierno del PP. Un modelo mediante el cual el pago de las obras se difiere en varios ejercicios presupuestarios con cargo, también, a las concesiones que se otorguen en un futuro para explotar dichas infraestructuras.