El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, anunció un recorte de cinco puntos del Impuesto sobre Sociedades durante tres años para aquellas pymes de menos de 25 trabajadores y un volumen de ventas inferior a 5 millones de euros y que, a 31 de diciembre de 2009, mantengan o mejoren su plantilla media de 2008. De esta forma, las pymes que cumplan estos requisitos pasarán a tener un tipo del 20%, frente al 25% actual.
Desde ATA se indicó que esta rebaja sólo afectará a un millón de autónomos constituidos en sociedades, de los 3,3 millones de trabajadores por cuenta propia.
En este sentido, aplaudió que el Gobierno haya hecho una primera "rectificación" y haya atendido una de las demandas de las asociaciones de autónomos, para que éstos tengan más margen fiscal en plena sequía financiera, pero esperó otra pronta rectificación para que estos beneficios se extiendan "a todo el tejido empresarial".
De hecho, Amor recordó que en el acuerdo recientemente firmado con el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, en el que figuran algunas medidas para apoyar la actividad de los autónomos, se plasmó un compromiso para revisar los módulos y el sistema de estimación directa, por lo que lamentó que las modificaciones necesarias no se hayan realizado en paralelo a la rebaja del Impuesto sobre Sociedades.
Pequeños empresarios
Por su parte, Jesús Bárcenas, presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), ha considerado que la medida es "buena", pero considera que es insuficiente y se ha mostrado "preocupado" por que la ayuda no llegue a aquellos que más lo necesitan.
"Sólo podrán acceder las empresas que obtienen beneficios porque son las que están pudiendo mantener el empleo", ha señalado Bárcenas, que ha señalado que aún habrá que esperar a ver cómo se desarrolla la tramitación de la rebaja.
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