Como se esperaba, el barón valenciano esquivó con gran habilidad casi todas las incómodas preguntas que se le hicieron sobre el caso Gürtel, acomodando casi todas las respuestas al resultado de la reunión con Blanco de la que salió visiblemente contento tras arrancarle un ambicioso plan de infraestructura y el compromiso de que el AVE llegará a Valencia a finales de 2010.
Para entonces,
Camps está convencido de que continuará siendo presidente de la Generalitat. “Y
o espero que en 2010, que es esta legislatura, esté el tren en marcha y como las elecciones no son hasta el 2011 pues espero seguir siendo presidente de la Generalitat", contestó cuando este diario quiso saber si estaba convencido de que podrá inaugurar él y no otro dirigente político las obras o si para entonces habrá tenido que presentar su dimisión si se le complican su situación procesal en el caso Gürtel.
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Camps hasta se permitió bromear con el asunto y quiso saber con una irónica sonrisa “
a quién iba dirigida tal pregunta”, mientras el propio
Blanco entraba también en el ´juego’ y comentaba entre risas que a lo mejor él no seguía como ministro de Fomento cuando llegara esa fecha.
Bromas aparte, el presidente de la Generalitat se zafó con evasivas del resto de las preguntas sobre el Gürtel, como por ejemplo hasta donde había colocado el listón para dimitir. O si se arrepentía de la relación de confianza que había depositado en
Álvaro Pérez, el bigotes, uno de los supuestos cabecillas de la
trama corrupta.
El barón valenciano continuó en tono irónico cuando explicó que cuando le toque inaugurar la línea junto al Rey y al ministro, le dirá a Blanco, “buenos días y muchas gracias”, primero en Atocha y, después
“intentaré bajarme unos minutos antes en Valencia para decirle otra vez buenos días y muchas gracias”.
Lo cierto es que ya desde media mañana la sala de prensa del Ministerio de Fomento ofrecía un lleno total, con numerosos periodistas nacionales y regionales atentos a la llegada de
Camps a la cita con Blanco. El presidente de la Generalitat, que fue puntual, fue recibido con un efusivo apretón de manos por el ministro. Camps también saludó a los funcionarios con los que se encontró a su paso hasta que se metió en el despacho de Blanco.
La expectación sobre el encuentro tenía doble motivo ya que este martes la defensa de Camps presenta un
recurso contra el auto del juez del TSJCV,
Jorge Flors, pidiendo de nuevo el archivo de la causa, y se celebra también justo un día antes de que los abogados de Camps y de los otros tres imputados en la trama valenciana del caso Gürtel acudan a declarar en nombre de los dirigentes del PP valenciano. Pero de estos dos extremos tampoco quiso hacer referencia el dirigente del PP.
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