El gobernador del Banco de España,
Miguel Angel Fernández Ordóñez, advirtió de que las numerosas ineficiencias en el sistema laboral español determinan el
"rotundo fracaso" en el objetivo de reducir el desempleo, por lo que insistió en la necesidad de emprender
"con urgencia" reformas de las instituciones laborales.
Su idea es que si en la crisis de 1959 fue "el final del proteccionismo" como gran corriente económica, ahora debe ser la del fin del despido indemnizado.
"La grave crisis de desempleo que estamos sufriendo actualmente debería llevarnos a examinar qué podemos cambiar de nuestro mercado de trabajo", dijo Fernández Ordóñez en las Jornadas sobre 'la singularidad de las cajas de ahorros' organizadas por la Federación de Usuarios de Cajas.
El gobernador del instituto emisor precisó que los costes del despido descansan a cargo exclusivamente del sector privado, lo que desanima la creación de empresas y la contratación en general, si bien se mostró contrario a centrar el debate exclusivamente sobre el abaratamiento del despido.