La presidenta madrileña reconoció este martes que conocía la existencia de dossieres relacionados con su vicepresidente y portavoz, Ignacio González, y con el consejero de Presidencia, e Interior, Francisco Granados, desde el año 2006... Pero Aguirre puntualiza con que en aquel momento se demostró que todo era "falso y calumnioso".
"En el año 2006, a mí me llamó el presidente del partido, Mariano Rajoy, para decirme que el tesorero tenía unos dossieres de los señores González y Granados. Inmediatamente, yo pedí a los señores González y Granados que hablaran con el tesorero y que aclararan cualquier asunto que pudiera parecer que pudiera poner en duda su honorabilidad. Se demostró que todo ello era falso y calumnioso", aseguró en la Asamblea de Madrid.
Y pese a todo ello, no admite que estuviera ocultando estos días la información: explicó que desde que se desveló la supuesta trama de espionaje sólo ha pedido "transparencia, transparencia y transparencia" con el fin de aclarar el asunto.
Al ser preguntada por si el PP aceptaría que se constituyera una comisión de investigación en el Parlamento regional para depurar responsabilidades, Aguirre indicó que no tiene por qué descartarlo, aunque pidió que se estudie si es compatible una investigación parlamentaria con una jurídica.
El culebrón
Aquí nadie quiere quedarse fuera del culebrón informativo del momento. Si bien
El País, gracias de nuevo a las generosas filtraciones, había conseguido el protagonismo mediático en los últimos tiempos, ahora
El Mundo, que lo había cuestionado, entra en el juego con una noticia sobre un dossier más que comprometedor de altos cargos de Esperanza Aguirre y que Rajoy habría podido leer.
Ese dossier tan delicado llegó, dice
El Mundo, incluso a manos de
Rajoy. Cuenta este periódico que el ex tesorero del PP
Álvaro Lapuerta ha manejado dossieres que afectan a altos cargos de la Comunidad de Madrid. En concreto, Lapuerta comentó a Rajoy tras las elecciones generales que tenía en su poder datos comprometedores que afectaban a
Ignacio González y
Francisco Granados.
Según
El Mundo, Rajoy transmitió entonces esa información a
Esperanza Aguirre, quien, a su vez, comunicó el mensaje a sus dos consejeros. Fue entonces cuando los dos mencionados, Granados y González, comentaron el tema con la 'fuente', Álvaro Lapuerta, quien no paró de demostrarle que esos datos eran comprometedores.
También añade algo nuevo en todo este caso
El País. El diario de Prisa comenta este martes que funcionarios de la Comunidad de Madrid han denunciado que desde la Consejería de Interior se encargaron seguimientos a políticos y que los trabajadores que se han negado a realizarlos han sufrido
"acoso y hostigamiento".