Morera comenzó su intervención hablando de los grandes cambios producidos en el sector energético de servicios, y más concretamente en Repsol, abordando también “
cómo se está redefiniendo esta estrategia inversora “.
Aclaró que Latinoamérica es una evolución reciente. Menor vulnerabilidad externa y menor percepción de riesgo del inversor, debido a la mayor estabilidad económica y política que en periodos anteriores; mayor seguridad jurídica y mayor estabilidad política, como consecuencia de la consolidación de la democracia.
Durante su ponencia habló del mayor desarrollo de los mercados y capitales, de la necesidad de contar con un mayor desarrollo regulatorio y de unos sistemas bancarios más sólidos, así como de la mayor calidad de los activos. También se refirió al atractivo de la Región para el sector de la Banca Minorista, en un marco potencial de mayor desarrollo del sector bancario en un entorno más sólido.
Según Morera, en la banca minorista el entorno más sólido de la región favorece el incremento de la bancarización, y citó como ejemplo la población de mayores de 18 años que no tienen acceso a servicios.
También la población que utiliza cuenta corriente es escasa. Entre los muchos retos que se han de enfrentar, figura el marco legal y regulatorio, ya que “
es imprescindible minimizar los obstáculos que incrementan los costes operativos”, añadió.
Morer concluyó que
“así como la buena marcha de la economía favorece el desarrollo de la banca minorista, el fortalecimiento de la banca estimula la economía en general, al gestionar de forma más eficiente y canalizar recursos a sectores claves para un mayor desarrollo económico”
Por su parte,
Miguel Ángel Martínez Beccar, socio gerente de Infomedia Consulting de Argentina destacó que la opinión pública es una “
estancia de mediación” y que en países en vía de desarrollo, la falta de seguridad jurídica es una dificultad importante para capturar inversiones.
Martínez Beccar defendió que la empresa tiene un rol social y político que es parte esencial de su realidad. Que desconocerla supone poner en riesgo una componente clave del negocio: la relación con el marco regulatorio. Que esta relación es siempre conflictiva porque se trata de ejercer “una cuota de poder. Y que es necesario que los directivos de empresas comprendan esa necesidad. Prescindir de este contexto es caer en una suerte de inmanentismo directivo que compromete definitivamente la viabilidad de la organización.
Por su parte
Gustavo Adolfo Gallo Machado, responsable de economía del diario El colombiano recordó que los analistas aseguran que hay cuatro sectores de industria que se les considera defensivos (o refugio) en esta crisis.
El primero de ellos es el sector salud. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ya advirtió que por los problemas económicos pueden aumentar los suicidios y los problemas cardiacos. Los nervios, la tensión, el estrés y otros problemas generados por la crisis hacen que esta industria pueda continuar sin mayores inconvenientes.
El segundo sector favorecido es el consumo básico, y la industria tabacalera en particular, que será uno de los beneficiados. Otro de los beneficiados será la Infraestructura, ya que los Gobiernos invertirán miles de millones de dólares en obras públicas para mover la economía y generar empleo.
Finalmente, las compañías del sector defensa se muestran como fuertes. El último conflicto en Gaza es buena prueba de ello; así, las inversiones en los presupuestos militares seguirán siendo cuantiosas.
Pero existe un subsector en el que también puede haber refugio, que es el Energético. Las inversiones en compañías eléctricas continúan siendo atractivas ya que sus balances muestran cifras fuertes, que permiten concluir que pueden aguantar el chaparrón.
Otros sectores, como el financiero, en el que las valoraciones han caído demasiado (especial¬mente en los países desarrollados), son atractivos, pero muchos siguen con temores hacia él. Lo mismo que en el comercio minorista, ya que la demanda y el consumo están por el suelo.
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