En la rueda de prensa posterior a la reunión con el ministro húngaro,
Ferenc Cyurcsany,
Zapatero aseguró que no van a hacer pronósticos "
sea cual sea el vencedor, el Gobierno trabajará con la mejor actitud". Pero, indirectamente se posicionó con una frase que añadió: "
no voy a hacer predicciones aunque los españoles han votado en las encuestas quienes son sus favoritos".
Bofetada a la administración Bush
De cara a los cambios que surgirán con la nueva administración de la Casa Blanca el presidente del Gobierno se mostró muy optimista: "
espero, confío en que la elección del nuevo presidente sea un factor de confianza económica de orden internacional más gobernable los próximos años".
Lo irónico de las declaraciones vino después cuando comentando la situación de la crisis internacional aseguró Zapatero "
yo creo en la economía húngara".