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La Iglesia calla, de momento, tras el contraataque del PSOE

La Iglesia calla, de momento, tras el contraataque del PSOE

·El PP critica la actitud "desmesurada y radical" del PSOE con la Iglesia

miércoles 02 de enero de 2008, 13:22h
El PSOE responde con un hay que poner "las cosas en su sitio", es decir, que la Iglesia se ocupe de sus asuntos y no intervenga en la vida política. Los socialistas han insinuado en su comunicado que la Iglesia se aparta de la democracia con actos como el del pasado domingo en Madrid donde aprovecharon un acto litúrgico para atacar duramente las políticas sociales del gobierno.
No han tardado las críticas a la "celebración litúrgica" presidida por el cardenal Rouco Varela que fue secundada por cientos de miles de personas el pasado domingo. Y es que aquí no sólo se habló de religión.  Con la excusa de congregar a los ciudadanos a favor de la "familia cristiana" en los discursos se escaparon frases que hirieron la sensibilidad de muchas personas, incluso cristianas como José Blanco quien aseguró que “a muchos cristianos nos dan ganas de borrarnos” de la Iglesia.

El pulso de los obispos al Gobierno se hizo patente en su rama más radical y se llegaron a escuchar frases como "el laicismo disuelve la democracia". Rouco Varela lamentó en su homilía "el ordenamiento jurídico ha dado marcha atrás respecto a lo que la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas reconocía y establecía: (...) que la familia es el núcleo natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a ser protegida por la sociedad y el Estado". Y es que en esta celebración religiosa fueron cuestionadas todas las leyes del Gobierno, incluidas aquellas que no ha modificado todavía, desde el divorcio, las bodas homosexuales a la ley de educación y la controvertida asignatura. En definitiva, un discurso, respaldado por el Papa, que se convirtió en una intromisión en el engranaje democrático del país.

Desde el primer momento las críticas llegaron desde grupos de gays y lesbianas o el portavoz parlamentario del Grupo Socialista en el Congreso, Diego López Garrido quien advirtió a su juicio, el "mayor error" fue precisamente "mezclar" la cuestión litúrgica y política pues su partido "no compite con la Iglesia católica en las elecciones". Por su parte, el líder de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares criticaba con estas palabras: "Una vez más el PP a través de los sectores más conservadores de la iglesia católica se moviliza en contra de los acuerdos, las leyes y la soberanía de nuestro parlamento atacando los acuerdos democráticos adoptados. Bajo la excusa de la defensa de la familia se esconde un ataque a la convivencia de un estado laico que es libre de regularse como decidan democráticamente sus ciudadanos. Las leyes sobre matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopación o vida en pareja que deseen ejercer los ciudadanos no suponen ningún riesgo para la iglesia sino sencillamente el ejercicio en libertad de su propia forma de vida. Son quienes incitan a esta manifestación los que pretenden obligarnos a todos a vivir como ellos quieren. Por eso frente a nuestro respeto por sus creencias demandamos el suyo hacia las decisiones democráticas adoptadas por los representantes de la soberanía popular".

La Iglesia se separa de los principios democráticos

Este miércoles la Ejecutiva del PSOE ha mandado un comunicado como respuesta formal a la Iglesia y ha mandado un claro mensaje: no pasarán. Bajo el título "Las cosas en su sitio" han criticado "el contenido político" vertido por algunos responsables de la jerarquía eclesiástica en la concentración del pasado domingo. Han aludido a que la defensa de la democracia debe hacerse precisamente respetando la Constitución, las leyes y la labor parlamentaria que es el verdadero órgano de representación de la ciudadanía y no descalificar ni discriminar "por motivos de religión" . Es la carta magna quien ha garantizado la libertad religiosa y la que ha determinado que "ninguna confesión tenga carácter estatal"  y "la igualdad de todos los ciudadanos" por lo que sobran los discursos en los que pretende acaparar desde un determinado sector una supuesta verdadera democracia.

La Ejecutiva recuerda que respetan cualquier opción religiosa pero recuerda que la autoridad la tienen en su orden doctrinal respecto a quienes participan de su confesión, pero no en el resto de ámbitos que competen al conjunto de la sociedad. Esto es, dicen los socialistas con rotundidad, "sólo quienes deliberadamente ignoran o no respetan estos principios se apartan de los fundamentos esenciales de la democracia".

En el comunicado los socialistas recuerdan que en la historia de la democracia de nuestro país los ciudadanos han elegido libremente caminar hacia un modelo de libertades donde se respete la pluralidad y la dignidad de las personas. Algo que se ha intensificado en estos últimos cuatro años con nuevas leyes que "han avanzado en la extensión de derechos y políticas sociales precisamente en favor de las familias". Los socialistas recuerdan que bajo el gobierno de Zapatero han establecido medidas para promover la natalidad, para conciliar la vida laboral y familiar, para dignificar a las familias de jubilados con pensiones más bajas, para apoyar a las familias con personas dependientes, para que las familias con menos recursos dispongan de más becas para que sus hijos puedan seguir estudiando.

También en estos cuatro años, nuevas leyes han creado nuevos derechos: para la igualdad efectiva entre mujeres y hombres, para reconocer el derecho a contraer matrimonio a todas las personas, sin discriminación alguna basada en su orientación sexual, y para poder poner fin, en ejercicio de la libertad, a una relación conyugal rota sin tener que sufrir dilaciones injustificadas.

Por último, los socialistas afirman que seguirán trabajando para que "los ciudadanos españoles sean más libres y con más derechos, y para que, al mismo tiempo, nuestra convivencia sea cada vez más respetuosa y tolerante".


IU exige medidas drásticas contra la Iglesia

IU no ha tardado en contestar al Gobierno. Concretamente la diputada de Izquierda Unida por Valencia, Isaura Navarro ha recordado a los socialistas que “ellos son claros artífices de la consolidación del poder de la Iglesia Católica desde que recuperamos la democracia”.

Navarro ha recordado al PSOE que “aunque ahora se escandalicen por los posicionamientos políticos de la Iglesia Católica si realmente hubieran querido desarrollar la laicidad del estado democrático, hubieran denunciado el Concordato, hubieran apoyado el derecho a la apostasía, hubieran tenido una actitud más decidida en trasladar la religión al ámbito privado, es decir, en las parroquias en el caso de la iglesia católica, al igual que lo hacen los musulmanes con la enseñanza del Corán en las mezquitas, o los hebreos en las sinagogas con el Torá y finalmente hubieran obligado a la iglesia católica a cumplir con la obligación de tributar el IVA, el impuesto de bienes e inmuebles o los impuestos de actos jurídicos documentados que el resto de españoles pagamos normalmente y de los cuales la Iglesia Católica está exenta. Todas estas cuestiones las hemos planteado durante la legislatura desde IU-ICV y el PSOE ha votado siempre en contra”. 

Para la diputada Navarro “los socialistas solo han reaccionado cuando la jerarquía eclesiástica ha cuestionado algunas leyes que se han aprobado en esta legislatura cuando ellos son claros artífices de la consolidación del poder de la Iglesia Católica desde que recuperamos la democracia. Por ejemplo hay que tener presente, entre otras cuestiones, como en la actualidad la mayoría de colegios concertados, que pagamos todos, están en manos de la Iglesia Católica ”.

Según Isaura Navarro “el Gobierno socialista, a pesar de las promesas electorales, no ha tenido una actitud decidida de avanzar hacia la laicidad. Ha buscado la paz social en sus relaciones con la jerarquía católica, ha pensado que incrementándoles la aportación económica les tendrían apaciguados, sin darse cuenta de la actitud insaciable de estos señores”.

El PP critica la actitud del PSOE con la Iglesia

El secretario ejecutivo de Justicia del PP, Ignacio Astarloa, ha expresado el "máximo respeto" de su partido a la concentración del pasado 30 de diciembre para apoyar a la familia cristiana y ha manifestado el "asombro" que ha producido a los populares la reacción "desmesurada y radical" del PSOE, que esta mañana ha hecho público un comunicado respondiendo a lo que consideran un ataque de los obispos.

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